sábado, 16 de junio de 2018

Volveré cuando los sapos bailen flamenco, M. Galardiel


Volveré cuando los sapos bailen flamenco
Magda Galardiel (Exiliada Laboral: del 15 M… a Bratislava)
Hace casi seis años acabé la carrera y, ante una perspectiva laboral desoladora en España, acepté una beca en Bratislava (Eslovaquia). En aquel momento no tenía ni idea ni del país ni del idioma, sólo sabía que era una oportunidad para subsistir (al menos) un par de meses, para evitar el desempleo y no esperar de brazos cruzados la mejora económica que me permitiera encontrar un trabajo estable "de lo mío" en mi país.

No fue fácil adaptarse a una ciudad extraña, con un idioma indescifrable y tan distinto al mío. Aún así, pienso que para los jóvenes de hoy es más fácil que para los adultos de entonces. Internet nos mantiene conectados y la nostalgia es más llevadera; al fin y al cabo, la mayoría seguimos en Europa y podemos permitirnos una visita a casa al menos una vez al año.
Por mi experiencia, la mayoría de españoles en el extranjero no tienen la mentalidad de ahorrar todo lo posible para enviar dinero. En cambio, intentamos vivir en el país de acogida como viviríamos si estuviéramos en casa: buscamos amigos, salimos a tomar cervezas o a cenar, viajamos, conocemos nuevas costumbres…
Eso provoca que llegue un momento donde tu corazón está dividido; cuando vuelves a casa te sientes extraño, como un “guiri” de vacaciones; cuando vuelves al país de acogida echas de menos muchísimas cosas...
Y aquí es cuando te das cuenta de que tienes que tomar una decisión, y decidir si tu estancia necesita llegar a su fin, o si has decidido quedarte “para siempre” (o a más largo plazo). Yo he vivido varias estampidas de gente que vuelve a casa aunque no tengan trabajo allí; y cuando uno se va, los cimientos de todos los demás se mueven, y muchas veces el corazón pesa más que la razón. La nostalgia se impone.
En mi caso, sé que jamás podré tener en España lo que tengo aquí: trabajo fijo en algo que me gusta y relacionado con mis estudios, un buen sueldo y un horario que me permite salir a las 4 o las 5 de la tarde, un pequeño apartamento para mí sola cerca del centro….
No fue fácil conseguirlo: tras la primera beca, estuve unos meses trabajando “en negro” hasta que conseguí otra beca, y luego tuve que darme de alta de autónomo. El sueldo era bajo, casi no llegaba a final de mes y estaba siempre preocupada (sobre todo con las becas) por temas administrativos (seguridad social, residencia oficial…). Cuando la situación se volvió insoportable decidí buscar trabajo y tras varias entrevistas, lo encontré. ¿Lo más irónico? La empresa que me tuvo en ese estado precario era española.
¿Volveré algún día? Tal vez, cuando las condiciones laborales en España igualen las eslovacas, o cuando los sapos bailen flamenco, que tal vez pase antes.



5 comentarios:

  1. Pues sí, Magda, si Eslovenia tiene un salario mínimo interprofesional de algo más de 800 euros mes y catorce pagas y ya en momento de contrarreforma laboral-PP en España de más de 700...No está Paña! para volver. Aunque algunos "tontos del bote" seguirán diciendo que si no hay "casera" ni "callos con garbanzos"...mejor no moverse de la patria.

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  2. Interesante mi errata (Eslovenia cuando debí escibir Eslovaquia...y por tanto el smi no llega a tanto.
    ¡Esta geografía!
    ¿Lo corregirá la autora de Volveré...? (que nos avisó del error por mail)
    ¡Quien sabe!
    En cualquier caso el esfuerzo de enjaretar este mensual es grande y el de leerlo y participar en él: una tremenda incógnita.

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  3. Querido Acacio, tu error es frecuente, creeme :)

    Aqui el salario minimo es muy bajo (480 eur), y solo tenemos 12 pagas. Pero en las empresas multinacionales cobras bastante mas y tienes un minimo de 13 pagas (la 13a habitualmente en funcion de si cumpliste objetivos durante el ano).

    En lo que Eslovaquia supera con creces a Espana es en la conciliacion de la vida personal y laboral: normalmente tienes jornada intensiva y flexible que te permite salir a las 4 de la tarde si quieres. Las empresas tambien ofrecen algunos beneficios adicionales, como tickets restaurante, clases de idiomas gratuitas, y a veces incluso guarderias.

    Y en la mayoria de puestos de trabajo te hacen fijo tras 3 meses, o 1 ano como maximo.

    Tal vez no sea la panacea, pero es mucho mejor que en la Espana que yo deje atras

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  4. Lástima amiga Magda que me coja "tan mayor"...para emigrar.
    A mí me han suspendido la mísera pensión no contributiva (369 euros) y me niegan la tarjeta sanitaria europea...y yo que sigo malito pero iba a cercarme unos días a Austria.
    en cualquier caso, alego y me pondré bruto (lo que es moda llamar "terrorista".
    Un gran abrazo

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  5. Lo de las pensiones en Espana mejor ni hablamos.... que barbaridad ! :(

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