Acacio Puig
Se aproxima la convocatoria, el 1 de Octubre, del
Referéndum Catalán y con ella la urgencia de tomar posición también en el caso
de quienes no siendo catalanes somos ciudadanos forzados y forzosos del reino
de España, lxs “legalmente atados” por
la Constitución de 1978. Hace un par de años, en 2015, que en los artículos Catalunya ¿porqué no asumimos lo evidente?
(oct.) y en ¿Monarquía española o
República catalana? (nov.) enuncié la mía.
Hoy,
recomiendo la lectura del número 153 de Viento Sur (agosto 2017) que dedica su
sección “PLURAL” a La cuestión catalana y
el problema español y especialmente -para gente “con prisas”, aunque el
conjunto de artículos vale bien la pena
de tomarse tiempo- el sistemático y elaborado texto Preguntas frecuentes sobre el referéndum catalán (Martí Caussa,
páginas 48 a 55).
Brevemente
voy a lo mío, que no pretende hacer prosélitxs sino reafirmar los criterios en
que baso mi apoyo al derecho de Autodeterminación y a la Independencia de
Catalunya y expresar mi solidaridad incondicional.
1.-El
derecho de los pueblos a la autodeterminación forma parte del andamiaje
demócrata-radical y comunista de quienes combatimos antaño por la recuperación
de la soberanía popular (sí, la que reside en nosotrxs, pueblo llano) sin
recortes ni perversas delegaciones en “representantes” incontrolables y menos,
en sangrientos dictadores de oficio.
El respeto a
esa soberanía y por ello a su ejercicio, alentó y alienta también nuestra vocación
anticolonial y antiimperialista que es
la mejor expresión política de la Fraternité
y el internacionalismo.
2.-El clamor
social por la realización del Referéndum en Catalunya es tan significativo y tan creciente como expresaron las últimas
Diadas y otras movilizaciones nacionalistas de acentos sociales y también, la propia
recomposición política del Parlament. Aunque todo ello sea vituperado por la cerrazón de los dos partidos
del régimen del 78 (PP y PSOE) y sus satélites políticos y mediáticos
respectivos, la batalla sigue abierta y se ganará más pronto que tarde.
La cerrazón
ante cualquier solución dialogada (y no policiaco-jurídica mediante la presión
de un Tribunal Constitucional dispuesto a empapelar a quien no encaje en el
modelo), está agotada como proyecto político centralista y reaccionario. Se
trata de una cerrazón lindante con la
fobia histérica, la que aviva el fuego con gasolina en un vano intento de congelar el statu-quo del
viejo “atado y bien atado” que legó el franquismo (“España: Una, Medio libre,
Monárquica y Bipartidista”).
3.-En cuanto
a buena parte de gentes de las agrupaciones de la izquierda (digamos fetén)… sus posiciones resultan
difíciles de justificar. Sus trajines entre el gorro frigio cada 14 de abril y
el calarse hasta las cejas la shapka bolchevique, cuando se les mienta el independentismo y la
autodeterminación de las naciones sin estado…son incoherentes y peligrosos.
Solo entonces, ante la amenaza de la “España rota” parecen excitarse con preguntas airadas sobre el
“contenido de clase” de la República catalana. Otros, más moderados, le niegan
el certificado de viabilidad. Se equivocan.
4.-Hay que
reseñar que las grietas en el autoritario y antisocial Régimen del 78 las ha
habido a lo largo de muchos años y su desgaste es irreversible. También, que Mareas
de todos los colores -espabiladas por las guerrillas de pensamiento,
asamblearismo y participación, practicadas por los movimientos 15 M en buena
parte del territorio- han permitido ya avances significativos en la
diversificación de la vida parlamentaria y municipal, en la conciencia política
de la gente. El conjunto de la acción social se va dotando de nuevos contenidos
y maneras a pesar del lamentable ralentí
organizativo de nuestros sindicatos, movimientos y partidos.
Pero es
evidente que el cuestionamiento social e institucional de este Régimen tiene
una formidable punta de lanza en las batallas que desembocan en el esperado Referéndum
del uno de octubre. Catalunya está siendo, en este período, “la gran mala
bicha” para un régimen caduco.
Imponer el
derecho del pueblo a decidir, crear una situación política nueva en la España
monárquica y postfranquista, dislocar la
trama de la Europa del Capital y avanzar en la práctica una Europa de los
Pueblos (desde abajo y no con diseños poscoloniales) son transformaciones de
mucho calado y a ellas nos apuntamos desde nuestra identidad internacionalista.
5.-Muchas
cosas tienen que cambiar antes de lograr una confederación de pueblos ibéricos
establecida libremente entre iguales (justo lo contrario de lo que dictaminó la constitución con el estado de las
autonomías) pero seguro que una
República Catalana -en este concreto período histórico- constituirá un
revulsivo de inercias políticas, sociales, territoriales y culturales que no deben dejar de apoyarse
con la mayor simpatía (y energía) por la amplia izquierda social de nuestro
país y de Europa.
Desde luego:
¡Sí a la República Catalana! Supondrá un gran paso en la apertura del proceso
constituyente que se nos escamoteó, consenso tras consenso, tras la muerte del
dictador.
(La Comuna y el derecho a decidir)
ResponderEliminarManuel Blanco Chivite/texto completo en www.lacomunapresxsdelfranquismo.org
Recientemente afirmaba el diario “El País”, con la clara intención de engañar a sus inocentes lectores, que: “El Ayuntamiento de Madrid cedió un espacio municipal a un colectivo que apoya la independencia de Cataluña”. Quizás, que no lo sabemos a ciencia cierta, la intención de la afirmación panfletaria era la de referirse a la convocatoria de un acto en la sala Terneras del Matadero donde se iba a celebrar un acto en defensa del Derecho democrático a Decidir; es decir, un acto que reivindica el derecho de los pueblos a decidir y a hacerlo en las urnas. El colectivo convocante, concertado para la ocasión, es el de “Madrileños por el derecho a decidir”. Su breve manifiesto lleva por título: “Por qué apoyar en Madrid un referéndum de autodeterminación”.
Por supuesto en el tal referéndum se podrá votar Si o votar NO. Y dicen las encuestas que la mayoría votaría NO.
¿Dónde, pues, el apoyo a la “independencia de Cataluña”?
El colectivo citado, como su propia denominación deja claro, no apoya, ni siquiera se pronuncia por el SÍ o por el NO a la independencia de Cataluña.
(…)
También el mismo panfleto pretende poner en entredicho a la asociación en cuyo nombre se solicitó el uso del espacio público (es decir, de todos) para el acto que, finamente fue, en perfecta connivencia:
-primero, amenazado por La Falange, grupo que se reclama del fascismo español de los años 30 y de toda a Dictadura franquista;
-a continuación, denunciado por la banda corrupta PP, grupo heredero directo de los intereses de la misma Dictadura a la que sigue defendiendo y…
-finalmente prohibido por la sentencia del juez de lo contencioso administrativo José Yusty Bastarreche. Como diría Valle Inclán “vaya tres patas para un banco”.
(…)
La Comuna no es un partido ni una organización política, de ahí que no se haya pronunciado ni debe hacerlo, por ejemplo, por una u otra opción política electoral, ni por la independencia o no de Cataluña, por poner dos ejemplos fácilmente comprensibles para los lectores habituales de El País.
(…)
En condiciones de clandestinidad y persecución sus miembros lucharon por la democracia y aunque hoy, como tal asociación, no se define por ninguna opción política, sí seguimos siendo, individual y colectivamente, defensores y luchadores por la democracia y contra los intentos totalizantes de limitarla e incluso de liquidarla paso a paso como ocurre hoy en España.
Es en este sentido, que hemos dado nuestro apoyo a la convocatoria por el derecho a decidir, porque creemos que se trata de un derecho básico y fundamental de todas las personas y de todos los pueblos.
Estamos porque el pueblo catalán decida y porque lo haga libremente en las urnas: SÍ o NO a la unidad con España o a la república independiente.
No vamos a dictar a nadie el SÍ o el NO. Estamos por el ejercicio de ese derecho democrático, sin amenazas, sin invasión policial/militar y sin presiones como las que se están dando en Cataluña por parte de un gobierno que ha puesto el problema en manos de los tribunales, de la policía y de la guardia civil. Y las amenazas son reales y están ya en marcha:
- Amenazas de multas, procesamientos y prisión para los alcaldes que desobedezcan las consignas antidemocráticas de los tribunales nacional-españolistas
- Amenazas de multas y de procesamientos según grados para todos los funcionarios que colaboren en la preparación del referéndum.
- Amenazas de multas a los 40.000 voluntarios para el 1-O de treinta mil euros por cabeza.
- Amenazas, multas, procesamientos y eventual prisión para los diferentes representantes democráticamente elegidos que organicen el 1-O
- Además de registros, aperturas de diligencias, persecuciones varias, interrogatorios y un largo y vergonzoso etcétera que quiere convertir a Cataluña en el reinado del terror nacionalista español.
(…)
Muy preciso el texto (leer el completo en la web citada) de Manuel Blanco. Evidentemente yo no comparto la limitada afirmación de que los miembros de la Comuna "lucharon por la democracia"...ni siquiera la comparto como TÁCTICA PARA OBTENER JUSTICIA, VERDAD Y REPARACIÓN.
ResponderEliminarentiendo que luchamos como miles y miles de antifranquistas por LAS LIBERTADES Y EL SOCIALISMO -fuera cual fuera el contenido que entonces cada familia política dio al término socialismo. Y no es baladí recordarlo: luchamos por la IGUALDAD además de por las plenas libertades y su ejercicio.
Los demócratas a palo seco consumían tiempo y neuronas en tertulias de café...por eso sus represaliados cuentan un número claramente insignificate.
Jaime Pastor-crónica de la Diada.
ResponderEliminarAyer pude participar en la Diada. Algunos apuntes:
1. En directo pude comprobar desde primera hora de la mañana (en el kiosko donde pude comprar la "samarreta" con toda naturalidad, en las familias y grupos de amigos que iban juntos a la manifestación, en el desarrollo de ésta a partir de la 17:14...) la ilusión que animaba a centenares de miles de personas, dispuestas a defender su derecho a votar el próximo 1-O y a practicar la desobediencia civil e institucional al régimen. Se puede discutir sobre el número de manifestantes pero es innegable la capacidad de movilización que demuestran año tras año desde 2012 la ANC, Ómnium y la AMI exigiendo el derecho a decidir su futuro tras el fracaso de la vía de un Estatut que, pese a los recortes que sufrió del parlamento español, fue rechazado por el Tribunal Constitucional en 2010 gracias al recurso del PP, dispuesto a explotar la catalanofobia al máximo.
2. Junto a esas y otras organizaciones sociales y culturales, las diferentes formaciones políticas que participaron en la protesta también expusieron en sus respectivos actos qué contenido quieren dar a esa aspiración común de una República catalana y son muchas las que apuestan por un proceso constituyente popular que también haga frente a las políticas neoliberales y austeritarias.
3. La prueba de fuerzas ha empezado ya pero si gana Rajoy mediante la represión, no será sólo la gente que se manifestó ayer la que saldrá derrotada sino todo el pueblo de Catalunya y también todos los pueblos del Estado español mediante nuevos ataques a sus libertades y a su derecho a decidir.
4. Calificar la jornada de ayer como una protesta controlada por las elites catalanas demuestra un desconocimiento enorme de la realidad y de la pluralidad que se reconoció en ella. Se puede discutir mucho sobre el debate parlamentario y si se podía haber hecho mejor y de forma más inclusiva esta convocatoria, pero lo que es evidente es que, fracasada la vía del referéndum pactado y ensayada ya una consulta no vinculante el 9-N de 2014, toca ahora desde fuera de Catalunya defender la legitimidad de este referéndum como única forma posible de saber qué opina la mayoría de la sociedad catalana.
"me dicen el Rhones"
ResponderEliminarTal como en el número de abril pasado de "Afinidades" ya expresé, y dada la esperada reactualización en la "parodia nacional" de la "cuestión catalana", que retorna cual tramuntana ya tradicional desde los tiempos de Prat de la Riba o más allá, mi consideración vuelve a decantarse por una especie de vilipendiada pero saludable y perpleja "equidistancia" (cosa mal vista por ambos bandos, afortunadamente) entre el disparate egolátrico y chauvinista del "predestinacionismo" catalanista, y la ineptitud españolista del "rajoismo", cuya característica de acción política para resolver los problemas viene siendo dejar que estos se pudran o mueran de muerte natural, (tiene huevos que la burguesía catalanista, campeones en recortes y corrupción, se respalde en los derechos humanos, o que el ppartido delincuente se ampare en la ley de leyes).
Lo que no sé es si la situación al día de hoy corresponde al pudrimiento o a todo lo contrario (ya veremos el 1-O), pero considerando el entusiasmo que parecen tener los partenaires-sosias nacionalistas (que tan poca cosa tienen que envidiar de los que -así mismo- les sirven de modelo), acabo teniendo que pensar aquello tan castizo de "tales para cuales"; aunque si la cosa fuera sólo de capitalistas, burguesitos, milicos, togadonas y todo su cortejo de fans, feligreses y prosélitos, pues bueno...,sería -como ya dije- lo tradicional, pero el tema es que mi pensamiento conjetural y residual de izquierdas se desorienta con lo que está ocurriendo.
Lo primero que no acabo de entender es lo de "autodeterminación y derecho a decidir", cierto es que, en principio, parecen frases incuestionables, absolutamente asumibles y muy recurrentes para el argumentario de izquierdas, pero más allá de su solemnidad propagandista "me se" plantean varias preguntas.
Primera, en la recién aprobada preconstitución catalana (ley de transitoriedad) ¿se recoge este derecho respecto a las comarcas, provincias o minorías que compondrían el futuro estado catalán, principalmente por si alguna decide continuar con el estado español, volver a él más tarde o hacerse a su vez independiente; se respetará su "decisión"?
Segunda, en el análisis puramente teórico ¿hasta donde llegan, tanto en el ámbito como en el objetivo, estos derechos?, ¿se circunscriben a determinados grupos organizados en mayor o menor medida por el principio de autoridad, disciplina y acatamiento, o pueden llegar con igual garantía al individuo disidente?
Tercero, al relance de la queja nacionalista de que "Cataluña no debe seguir pagando las juergas de holgazanes", y desde un planteamiento de izquierdas ¿donde queda el debate de la redistribución de la riqueza entre territorios-pueblo ricos y territorios-pueblo pobres en la "cuestión catalana"; tan reivindicada por la izquierda clásica en la relación entre las clases sociales?,¿se puede resumir todo el conflicto a una cuestión de pesetillas?
El cuerpo me pide más debate, pero de momento es suficiente. Sólo recordar la idea atribuida a Cánovas, y que todos los estatistas de un lado y otro de este litigio parecen seguir: "Con la patria como con la madre, con razón o sin ella".
Amigo Rhones.
ResponderEliminarAgradezco tu comentario y te opino –sin ánimo de pontificar, en absoluto.
Desde un punto de vista libertario yo defiendo la confederación de municipios libres…quizá por aquello de que “lo pequeño” no solo es bonito sino que ofrece más posibilidades de participación y control social de las instancias representativas en lo político (que en cierto sentido, son inevitables…como vemos en nuestra propia lucha por reforestar Riaguas). Creo pues, que la confederación entre iguales (aquellas comunas libres de que hablaron nuestros ancestros) es la expresión más libre de la fraternidad entre pueblos, la que razonablemente debe estructurar el Apoyo Mutuo.
Pero ahora el asunto es más de bulto y no depende de quien manda porque aunque una parte de la burguesía catalana esté tras sus representantes institucionales, otros sectores sociales están con la CUP, con ERC y con otras formaciones que abogan primero por el derecho a decidir y una parte de ellos –veremos- por la INDEPENDENCIA REPUBLICANA (además, otros sectores de la misma burguesía empresarial están con “la España Una”).
Como dices, veremos y analizaremos los resultados del 1-O y también como se comportan los operativos policiales, militares y jurídicos del nacionalismo español que encarnan partidos constitucionalistas a secas (PP, PSOE, Cs…). Hasta el momento la catalanofobia que destilan ellos y sus aparatos mediáticos, no permite presagiar nada saludable. Cercan el derecho a decidir por medio de un estado de excepción no declarado e idolatran una Constitución y un modelo Estado de las Autonomías que se decidió por arriba, con la amenaza de “ruido de sables” y la anuencia sin matices de la “izquierda leal” del momento 1978 (PSOE y PCE).
No decidimos entonces (1978) el pueblo llano, una restauración monárquica, tampoco una Amnistía como ley de punto final del genocidio franquista, ni un texto constitucional que solo respaldase formalmente derechos y libertades políticas y sociales…y la AUTODETERMINACIÓN es una parte de aquellos derechos escamoteados en 1978 (y viene de atrás…ya recuerdas aquello de “Mejor una España Roja que Rota” ¡que afán de seguir con la idea del “imperio”!).
El derecho a la autodeterminación de los pueblos- que ayer EL PAIS presentaba como algo insólito- debe ser cosa de la falta de formación del “precariado periodístico” (al que aludía también ayer 17 de septiembre en el mismo mediocre-medio el súper-Boss Cebrián) está inscrito en la propia carta fundacional de la ONU: La Carta de las Naciones Unidas de 26 de junio de 1945 año reconoce en su primer artículo el principio de «libre determinación de los pueblos», junto al de la «igualdad de derechos», como base del orden internacional. …Pero en cualquier caso, como bien dijo Bakunin : si no existiese ¡habría que imponerlo!
Sin embargo, si se altera la calma chicha de la charca ibérica pueden (digo pueden) abrirse posibilidades para todxs (además de afirmar el derecho a decidir de los afectados: en este caso lxs catalanes pero también poner encima de la mesa el derecho de REFERENDUM es importantísimo en asuntos “no nacionalistas” como por ejemplo la nuclearización o no como opción energética… Todo lo que conduzca a dar la palabra al pueblo y con ella la posibilidad de interferir en el “ordeno y mando” propio de “sus representantes electos” me parece un gran paso adelante en la autonomía…aunque en cualquier caso, “el disidente –mujer u hombre- (tu segunda preocupación) siempre se lo tiene que pelear a veces en solitario otras colectivamente o bien, buscar su “exilio interior”… porque nadie regala ná de ná.
En cuanto al asunto de las pelillas…pues no sé. Si en la factible República Catalana derogan la Contrarreforma Laboral de Rajoy y la reforma constitucional pactada por PSOE y PP (¡Primero la Deuda!) otro gallo puede cantar al presente y futuro de lxs trabajadorxs.
(y seguiremos...)
Sólo unas pequeñas cosas para no convertir esto en una especie de partida de pin-pon en mitad del desierto... Hombre, apelar ahora a la ONU para buscar legitimidad me parece oportunista y artificial como poco, esta institución que representa como pocas eso del institucionali(ci)smo, aunque para otros no es más que un "chiste" con "propósitos" como los que intenta consagrar ese famoso art 1 "Fomentar bla,bla,bla... y al de la libre determinación de los pueblos". "Propósitos" que no se extienden más allá de la ambigüedad en la que se esconden para que cada cual los aplique según le venga en gana.
ResponderEliminarYo sigo preguntando a quién corresponda ¿qué es un pueblo? ( y no me vale lo de la M. Ostiz), ¿quién determina esto?, ¿acaso lo deciden los estados-imperio que tienen derecho a veto en esta institución que promueve la igualdad entre las naciones? o ¿son los demagogos nacional-nacionalistas y sus masas que se lo autoproclaman?
En un subidón de acratismo y de espirituosidad me permito decir que me la pela bakunin,prudon y todos los liderillos rojinegros.
Y que si me preocupa que el charco ibérico -demasiado agitado- se pueda convertir en avispero yugoslavo, también reconozco que en estos días disfruto con la berrea de los nacional-nacionalistas cuando sus vanguardias entrechocan las astas.
Dos cositas.
ResponderEliminar1. Un pueblo es una población que comparte territorio, cultura e historia (s).
2. Citaba a la Onu y el derecho de los pueblos a determinarse porque para el PAIS esa cláusula no existe como citaba. A mi se me importa una higa la ONU que deja se transgredan sus declaraciones por quienes de veras manda (USA, Israel...) pero es cierto que además de Lenin -y aquello del "derecho de los pueblos a la libre determinación incluída la separación" dicho tras la Gran Guerra y principio inserto en la primera Constitución Sovietica- La Carta fundacional de la Onu reconoce ese derecho.
En cualquier caso...¡la lucha paga! y en Catalunya se está luchando pero que mucho-mucho.
Añado:
http://www.elnacional.cat/es/politica/entrevista-jaime-pastor-referendum_180204_102.html
"Una vez agotadas las vías de negociación y acuerdo, no queda otra vía que el referéndum unilateral"
"Nuestra tarea fuera de Catalunya no es dedicarnos a criticar a quienes proponen este referéndum con todas sus garantías posibles"
"El mismo hecho de que se pregunte sobre una República catalana ya es un cuestionamiento de la monarquía"
En fin amigo Rhones:
¡ARRIEROS SOMOS Y EN EL CAMINO NOS ENCONTRAEMOS!
Comunicado del Sindicato Popular de Vendedores Ambulantes y del Espacio del Inmigrante:
ResponderEliminarFrente a la situación de los últimos días en Cataluña, desde el Sindicato Popular de Vendedores Ambulantes y el Espacio del Inmigrante condenamos la vulneración de derechos y libertades al pueblo catalán.
Reivindicamos el derecho que tienen los pueblos a decidir sobre su futuro, el cual no debe ser negado ni mucho menos perseguido.
Extendemos toda nuestra solidaridad a las personas y a los colectivos populares que desde abajo y desde siempre han luchado por el derecho a la autodeterminación de los pueblos.
Estamos atentos a todo lo que está pasando y aunque nadie nos ha preguntado o invitado a ser parte de este momento histórico los migrantes nos hemos autoinvitado; ya estamos acostumbrados a que se piense que no sabemos nada, que no nos enteramos, que no somos ciudadanos, que no votamos, que no sabemos de política, pero están equivocados, llevamos años luchando y resistiendo ante este gobierno español colonial y racista. Hace muchas décadas y siglos que nos declararon su guerra de exterminio y aquí estamos y seguimos vivos. Tenemos claro que como migrantes aquí nos quedamos, por más que nos amenacen, encarcelen o maten, porque si alguien sobra en este país son los de arriba, los corruptos, los gobernantes.
Nosotros miramos que estos días el gobierno está dejando ver en Catalunya su verdadero rostro y vocación, el de la violencia, la represión y el autoritarismo, quieren sembrar miedo en los corazones catalanes. Se creen que podrán agredir, amenazar, amedrentar y pisotear la dignidad de este pueblo que defiende su tierra, sin que haya resistencia. Creen que con porras y policías lograran cambiar su conciencia.
Desde que llegamos a Catalunya hemos mirado dos caras: una Cataluña rebelde, popular y digna que lucha por su derecho a decidir su futuro. A ustedes les decimos que nos sentimos convocados, animados y entusiasmados por lo que en estos momentos están logrando y esperemos que se dé la oportunidad de crear espacios de participación donde quepamos todas y todos, sin racismo, ni exclusión. (SIGUE EN EL COMENTARIO POSTERIOR)
Nos gustaría que esta posible nueva república además de desconectarse legal y jurídicamente de España, también se desconecte de su espíritu y mentalidad colonialista y racista. Que lo que se construya sea desde abajo para cambiar su orden legal, social y político, por otro más justo, humano e incluyente, porque en una Cataluña construida desde arriba, con los mismos de siempre poco cambiará para todas nosotras, los pobres, los relegados de siempre, los de abajo.
ResponderEliminarPero también conocemos la Catalunya oligárquica, colonial y racista que nos excluye, nos persigue y nos castiga por tener otro color de piel, otra lengua, otra religión otra manera de pensar. Por eso tenemos que dejar claro que tenemos memoria y no olvidamos, que no apoyamos ni acompañamos al gobierno español ni a la Generalitat, porque son dos gobiernos que para nosotros tienen la misma cara; compiten por ver quién caza, encarcela o expulsa más migrantes, compiten por ver quién pone más muros, más leyes, más normas y reglas que nos imposibilite tener una vida digna.
También creemos que esta situación no se arregla desde la legalidad, ni en los tribunales, nuestros cuerpos son la materia perfecta de la maquinaria de la ilegalización, sabemos que los derechos se ganan en la calle.
Por último, creemos, ojalá nos equivoquemos, que la actual situación será más dura, el Estado español prepara la represión con sus policías en las calles y por experiencia sabemos que la represión a quien más toca es a los de abajo, a los organizados, a los pobres, a las excluidas, y a los migrantes, por tal motivo convocamos a todas las migrantes y los migrantes, con o sin papeles a apoyar, a solidarizarse con esta lucha digna y rebelde.
Convocamos a resistir, a rebelarse, a decir NO a la represión, a decir NO a las persecuciones, a decir NO a la cárcel, a decir NO a la violencia, de quien sólo busca tener derecho a decidir su futuro.
P.d: si nadie les quiere imprimir sus papeletas, les decimos que nosotras las imprimimos, porque ya no pueden ilegalizarnos, hace mucho tiempo que lo somos y se nos quitó el miedo.
[Publicado originalmente en Facebook aquí
por el Sindicato Popular de Vendedores Ambulantes]
Ni un paso atrás. Juzgar a los actuales descendientes ideológicos de aquellos a quienes el MEMORIALISMO ANTIFASCISTA no logramos llevar a Juicio. Es decir: Gobierno del reino de España por lanzar a sus fuerzas del orden contra la población que votó ayer.
ResponderEliminar¿Si el Referendum ya habia sido declarado ilegal y torpedeado por todos los medios, a que venía la exhibición de fuerza? Pues AL UNICO DESEO DE AMEDRENTAR.
Machacan mediáticamente con la LEY...¡Recuerdan completamente al sofisma franquista del respeto a la LEY propia de "la democracia orgánica" (así bautizó el franquismo a su dictadura). Su constitución, su régimen...No son los nuestros.
¡que se vayan!